Cómo decirle a alguien que necesita ir al gimnasio

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Una guía completa para insultar a otros por su propio bien

Oh, los males del mundo moderno. Todos somos un montón de fanáticos del fitness, ¿verdad? Equivocado. Algunos de nosotros todavía nos aferramos a nuestro estatus de adictos a la televisión, agitando con orgullo nuestros brazos flácidos frente a la salud y el bienestar. Y como familiar o conocido entrometido y preocupado, es claramente tu deber decirles que vayan al gimnasio. Por suerte para ti, te respaldamos con esta guía súper útil y nada ofensiva sobre cómo hacer precisamente eso. ¡Entonces, abróchese el cinturón y prepárese para cambiar la vida de alguien con su consejo no solicitado!

Paso 1: elige a tu víctima

Lo primero es lo primero, debes elegir a la persona afortunada que recibirá tus preciosas perlas de sabiduría. No puedes ir por ahí diciéndoles a todos que vayan al gimnasio, ¿verdad? Eso sería absurdo. En su lugar, necesitas encontrar a esa persona perfecta que solo está rogando por tu consejo. Busque a los que se esconden en ropa holgada, siempre comen un bocadillo o simplemente no presumen de un paquete de seis. Ellos son los que obviamente necesitan tu ayuda.

Paso 2: analiza tu relación

Ahora que ha encontrado a la persona “afortunada”, es hora de considerar su relación. ¿Eres lo suficientemente cercano a esta persona para ofrecer un consejo tan valioso? Si ya son amigos, o incluso conocidos, perfecto. Pero si solo eres un extraño, ¡no te preocupes! Todavía puedes difundir tu sabiduría infinita. Solo recuerda que tu enfoque puede variar dependiendo de tu conexión. Después de todo, ¿a quién no le gustan los consejos de un completo extraño que le cambiarán la vida?

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Paso 3: encuentra el momento y el lugar perfectos

Tiempo lo es todo. No querrás decirle a alguien que necesita ir al gimnasio mientras ya está en el gimnasio. Eso sería tonto. Necesita encontrar el momento y el lugar perfectos, preferiblemente cuando disfrutan de una comida suculenta o descansan en casa. De esa manera, realmente puedes enfatizar el contraste entre su situación actual y dónde debería estar: sudando en el gimnasio.

Paso 4: Sé sutil (o no)

Ahora que ha encontrado el momento y el lugar perfectos, es hora de decírselo. Hay dos maneras de hacerlo: ser sutil o ser brutalmente honesto. Si opta por un enfoque sutil, considere usar frases como: “Sabes, me he dado cuenta de que últimamente has estado disfrutando de esas donas” o “Realmente has dominado el arte de sentarte en el sofá, ¿verdad?”. ¿tú?” Estos cumplidos indirectos deberían ser el truco.

Por otro lado, si prefieres el enfoque brutalmente honesto, solo sal y dilo: “Oye, deberías ir al gimnasio, como ayer”. ¿Quién tiene tiempo para la sutileza, de todos modos?

Paso 5: usa las redes sociales

Si no te sientes lo suficientemente valiente como para decírselo en persona (o simplemente quieres difundir tus consejos no solicitados por todas partes), las redes sociales son la plataforma perfecta. Puede compartir memes de fitness, etiquetarlos en videos de ejercicios o incluso publicar un artículo sobre cómo decirle a alguien que necesita ir al gimnasio (guiño, guiño). Nada dice “Me importa” como avergonzar pasiva-agresivamente a alguien en línea.

Paso 6: Ofrecer “Soporte”

Después de haberles dicho con éxito que necesitan ir al gimnasio, es importante ofrecerles su apoyo inquebrantable. Esta es tu oportunidad de demostrar que no solo eres un entrometido entrometido, sino una persona cariñosa y empática. Por lo tanto, sugiera una membresía de gimnasio, un compañero de entrenamiento o incluso acompáñelos a su primer entrenamiento. Solo asegúrate de recordarles constantemente que fue tu brillante idea en primer lugar. Definitivamente apreciarán tu humilde jactancia.

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Paso 7: Celebre su “progreso”

A medida que comiencen a ir al gimnasio, asegúrese de celebrar su progreso, incluso si es mínimo. Después de todo, eres responsable de su transformación y todos deberían saberlo. No olvide documentar su viaje en las redes sociales, especialmente los momentos vergonzosos, como cuando luchan por levantar una mancuerna de 10 libras o no saben cómo usar la caminadora. Esto no solo los motivará a trabajar más duro, sino que también brindará entretenimiento a sus seguidores. Hable acerca de un ganar-ganar!

Paso 8: Ofrezca continuamente consejos no solicitados

Ahora que han comenzado a ir al gimnasio, es crucial que sigas ofreciendo tus consejos no solicitados. Después de todo, ahora eres un experto, ¿verdad? Asegúrese de criticar su forma, sugerir nuevas rutinas de ejercicios y ofrecer consejos sobre nutrición, incluso si no tiene experiencia o conocimiento real en estas áreas. Sin duda, su aporte constante acelerará su progreso y los hará eternamente agradecidos por su “experiencia”.

Paso 9: Nunca dejes que se olviden

Una vez que finalmente hayan logrado sus objetivos de acondicionamiento físico, es esencial que nunca les dejes olvidar cómo comenzó todo, con tus consejos que cambiarán su vida, por supuesto. Mencione casualmente su contribución de vez en cuando, solo para mantenerlos humildes. Pueden poner los ojos en blanco o suspirar profundamente, pero en el fondo, sabrán que eres el verdadero MVP.

Paso 10: Encuentre una nueva víctima

Ahora que ha transformado con éxito la vida de una persona, es hora de pasar a la siguiente. Después de todo, no hay descanso para los malvados. Entonces, sigue adelante y continúa con tu noble cruzada de decirle a la gente que necesita ir al gimnasio. Quién sabe, incluso podría ganar una santidad por sus esfuerzos desinteresados.

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¡Tienes esto!

Decirle a alguien que necesita ir al gimnasio no solo es su deber cívico, sino también una experiencia verdaderamente gratificante. Con esta guía completa, ahora tiene todas las herramientas que necesita para cambiar vidas y difundir sus consejos no solicitados por todas partes. Por lo tanto, siga adelante y deléitese con su nuevo estatus como evangelista del fitness, y recuerde: está haciendo esto por su propio bien, sin importar cuántas veces le digan que se ocupe de sus propios asuntos. ¡Buena suerte entrometiéndose!

Aarón Stark